RT | Una
sucesión de horrores que conocemos gracias al testimonio de alguien que los
vivió de cerca. Se trata de la madre Agnés Mariam de la Croix, monja de origen
franco-libanés del monasterio greco-católico de San Jacobo el Mutilado de Qara,
Siria, a la que los terroristas del Estado Islámico (EI) quieren dar muerte.
La monja ha
narrado a RT que en la ciudad siria de Alepo, donde recientemente estuvo,
actualmente muchas personas están sufriendo de enfermedades causadas de
"falta de servicios alimentarios". La religiosa evoca cómo vio a los
terroristas a "solo 30 metros de las residencias" disparando contra
todo "lo que se movía". La monja compara con un "infierno"
la situación en Siria, donde vio a niños a quienes "les habían cortado una
pierna o un brazo".
Guerra
artificial promovida por agentes externos
De la Croix
ha destacado además a RT que en caso de Siria no se trata de una guerra civil
porque comunidades distintas lograron convivir en esta sociedad durante
"centenares de años. La religiosa tacha este conflicto de "guerra
artificial" promovida y financiada por agentes externos.
Asimismo,
la religiosa ha revelado al rotativo ruso 'Moskóvskiy Komsomolets' la cruda
situación que se vive en las zonas de Siria controladas por los extremistas y,
de manera especial, los horrores del yihadismo sexual
Su relato a
la publicación comienza en la ciudad siria de Homs, donde se dirigió en
noviembre de 2011. "Entonces los medios de comunicación occidentales
hablaban de manifestantes pacíficos, pero en realidad se trataba de escuadrones
suicidas. Su objetivo era sembrar la violencia y paralizar la vida pacífica de
la ciudad", recuerda de la Croix.
"En un
día vi en el hospital más de 100 cadáveres. Vi lagos de sangre. Tengo todos los
videos. Le sangrarían los ojos si ven todos ellos", admite la monja.
De la Croix
opina que lo que pasó en Homs no es responsabilidad del presidente sirio Bashar
al Assad. "Posteriormente, en Occidente se afirmó que Assad organizó todo
esto, pero tengo las listas de los muertos y un 75% de ellos son soldados del
Gobierno. Los mataron para desestabilizar y acabar con el poder de Assad",
destaca la monja.
Palizas por
abrirse una cuenta en Facebook
Las
ejecuciones, recuerda la madre Agnés Mariam de la Croix, se producen
"diariamente". "Por ejemplo, si usted fuma se le cortan los
dedos. Una chica recientemente recibió una paliza por crear un perfil en
Facebook", cuenta.
Violación
de mujeres
La monja
señala que los yihadistas violan a mujeres que no cumplan con las normas del
islam como "una práctica oficial". "Da igual que sea una
hermana, madre, hija: no importa. Esto se llama la yihad sexual", precisa.
La religiosa recuerda un caso en que un líder del EI violó "a 700
mujeres" en una zona de Siria situada fuera del control de los
terroristas.
'Matrimonios'
de un par de horas
De la Croix
cuenta además que para no violar las leyes islámicas, los yihadistas 'camuflan'
la prostitución casándose durante un par de horas. La monja cuenta que cada 2-3
horas las mujeres tienen otro marido que "se divierte" con ellas.
"Estas mujeres no tienen voz, son simplemente violadas", subraya.
La
religiosa greco-católica remarca que actualmente en las filas del EI "se
observa la poligamia en masa: se casan con niñas de 9, 10, 11 años de
edad". "Muchas de ellas mueren pronto. Su cuerpo no puede soportarlo
(...) Sin embargo, pocas organizaciones internacionales se preocupan de
ello", lamenta.
Compra-venta
de personas en mercados por 50 dólares
"También
en el Estado Islámico existe un mercado donde los terroristas venden seres
humanos. Hasta allí van los jeques, que tocan a los esclavos, les miran la
boca, les tocan el pecho, las piernas, como en las películas", prosigue
Agnes. "A veces estas personas pueden costar apenas 50 dólares".
La monja
vierte la culpa de lo sucedido a los países occidentales recordando que
"en lugar de apoyar y favorecer fuertemente el Estado laico [en Siria]
formaron una alianza con los Hermanos Musulmanes".
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.