Este viernes, el gobernador de Ohio, John
Kasich, firmó la ley que penalizará a los médicos que practiquen abortos, si se
elige como causa «en su totalidad o en parte», el hecho de que el niño por
nacer haya recibido un diagnóstico prenatal de síndrome de Down.
El proyecto de ley fue aprobado por el
Senado estatal por 20-12 a principios de este mes. Los promotores de la ley
confiaban en que Kasich aprobaría la medida, dado que el gobernador republicano
ha aprobado más de una docena de leyes en los últimos seis años que han
limitado la protección legal del aborto o su financiación.
La ley penalizará a los médicos con un delito grave de cuarto
grado, lo que implica la posibilidad de que les sea retirada la licencia para ejercer
la medicina, si realizan un aborto total o parcialmente motivado por el
síndrome de Down. Las madres no se enfrentarán a cargo alguno.
Leyes similares han sido aprobadas en
Indiana y Dakota del Norte, pero la ley de Indiana fue revocada por un juez de
distrito.
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