Un avión caza israelí bombardeó el miércoles
(22) las posiciones del Ejército Árabe de Siria en las montañas de Al-Qalamun,
al noroeste de Damasco, anunciandolo asi el gobierno sirio. El avión de combate
sobrevoló la región de Arsal Barrens, en el este del Líbano, donde se
encuentran los campos del Estado Islámico y Al Qaeda.
Este es el segundo ataque que va de este
mes. El día 8 de febrero las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) enfrentaron
posiciones sirias en los Altos del Golán, en la frontera de los dos países. El
Ejército israelí afirmo que era una represalia luego de que un proyectil de
tanque cayera en el territorio controlado por el Estado judío.
Los analistas temen que una nueva guerra
esté a punto de comenzar. De hecho, desde el comienzo de la guerra civil en
Siria, en 2011, Israel hizo bombardeos ocasionales contra las posiciones
militares en Siria. En septiembre del año pasado, las tropas sirias afirmaron
haber derribado un avión no tripulado de la Fuerza Aérea israelí, algo que fue
negado por las IDF.
También hay que tener en cuenta que es lo
que ocurre en la región, y no recibe la atención por parte de los medios de
comunicación. Durante la última semana, el líder de Hezbollah, Hassan
Nasrallah, hizo varias declaraciones agresivas, dando entrevistas en la
televisión iraní y los medios de comunicación libaneses.
El líder de la organización terrorista, que
participa en la guerra en Siria, amenazó con atacar a Israel afirmando que
“Hezbolá tendrá líneas rojas en la próxima guerra con Israel”, lo que indica
que el objetivo principal sería el reactor nuclear de Dimona, que produce
electricidad. También explico que Israel debería pensar en “un millón de veces
antes de ir a la guerra con el Líbano”.
La semana pasada, el presidente libanés,
Michel Aoun, defendió a Hezbolá, señalando que las armas del grupo militar son
“parte esencial” en defensa del Líbano contra Israel. “Mientras el territorio
está ocupado por Israel, el ejército no es lo suficientemente potente como para
luchar contra Israel, sentimos la necesidad de mantener las armas de la
resistencia para complementar el ejército”, aseguro Aoun, a la cadena de
televisión egipcia CBC.
Él se refería a los Altos del Golán, que
fueron recuperados por el ejército israelí en 1967, durante la Guerra de los
Seis Días. La única región que fue anexada por el gobierno israelí en 1981.
Esta región incluye alrededor de dos tercios de las colinas y el Monte Hermón.
Desde la década de 1980, luego del alto al fuego entre Israel y Siria, el lugar
comenzó a funcionar como límite entre los dos países.
En la reciente reunión del primer ministro
Benjamin Netanyahu con el presidente Donald Trump, Israel pidió a los EE.UU.
que reconozca su soberanía sobre el lugar, pero la solicitud no fue aceptada.
Con el caos que vive Siria, grupos
radicales como el Estado Islámico Hezbolá ya establecieron un campamento a unos
15 kilómetros de la frontera con Israel y han lanzado cohetes y morteros contra
el territorio israelí.
En los últimos días, los yihadistas de EI
tomaron Tseel, Sahem al Golán, Adwan y Tel Jamoua. Ocupados en otros frentes de
batalla, el ejército sirio fue tomado por sorpresa y no tenía fuerzas para
luchar.
La frontera sur de Siria vive una situación
tensa
En abril del año pasado, Netanyahu admitió
que las IDF realizaron ataques contra el territorio sirio. A finales de 2016,
el ministro de Defensa, Avigdor Liberman admitió que Israel atacó objetivos en
Siria para impedir el contrabando de armas de Hezbolá.
Ahora que Hezbolá ha anunciado la compra de
misiles anti-buques sofisticados procedentes de Rusia, la amenaza velada es
contra los campos de gas de Israel en el Mar Mediterráneo y la marina israelí.
La posesión de misiles Yakhont fue revelada
por oficiales de inteligencia occidentales durante la Conferencia de Seguridad
de Munich, donde los líderes y ministros de defensa de varios países se
reunieron para discutir los problemas de seguridad importantes.
Los medios israelíes informaron que el
ataque israelí de este miércoles, que fue en territorio sirio, tenía como
objetivo un cargamento de armas a Hezbolá.
Israel y Hezbolá libraron una intensa
guerra de 33 días en 2006. Llegando a su fin después de la resolución 1701 del
Consejo de Seguridad de la ONU, que pidió el desarme del grupo libanés, cosa
que nunca ocurrió.
Fuente: Gospel
Prime
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.