Dios protegió a Pastor luego de que estallara una Bomba en su auto

El pastor estaba saliendo de su casa para ir a la iglesia. Entró en su carro, colocó las llaves en la ignición y lo encendió como lo hizo cientos de veces antes. Sin embargo, en esta oportunidad término sorprendido por una explosión que incendió el carro envolviéndolo en llamas.

“Yo estaba totalmente confundido, no podía ver nada”, dijo el pastor Joseph, que vive en Bagdad, capital de Irak. Desorientado, momentáneamente ciego y en estado de shock, afirma qué bueno una mujer gritando: “Este hombre se está muriendo!”.

Joseph pensó que era su fin, pero milagrosamente sobrevivió al atentado contra su vida, planeado por terroristas islámicos. Terminó siendo retirado de los escombros por personas que pasaban por allí.

“El carro quedó totalmente destruido, excepto por mi asiento”, relató Joseph. No tuve grandes daños. “El carro estaba en llamas, pero yo no me quemé. Nada me tocó, no perdí ni una gota de sangre”, contó, afirmando que la única explicación posible es la intervención divina.

El joven pastor vive en un país donde hace 7 años explotan bombas en lugares públicos con gran frecuencia y los radicales islámicos luchan por el control de más territorios. “Dios me dio más tiempo. Colocó su sello en ministerio, y dijo: ‘Ve hacia adelante’. Dios me alentó en aquel día”, recuerda.

El estado islámico asumió el control de grandes partes de Irak al mismo tiempo que los musulmanes comenzaron a convertirse a Cristo en números sorprendentes. Para Joseph, Dios lo salvó para que quedase en Bagdad.

“Cuando me preguntan por qué sigo viviendo con mi familia en Bagdad, les cuento esta historia”, explica. “Hay violencia en todos lados, persecución en todos lados. Nosotros sufrimos las mismas cosas que todas las personas de aquí, pero nosotros queremos quedarnos con ellos.”

Obviamente, la experiencia renovó la fe del líder cristiano. “Sé que Dios está conmigo en todo momento”, asegura. El, su esposa y sus dos hijos luchan con dificultad en una región donde la mayoría de los cristianos fue asesinada o se mudó. Pero él relata que hay muchos nuevos convertidos en su iglesia.

“Nos gozamos de ser como una Menorá candelabro judío. Somos un pequeño grupo, pero confiamos en nuestro Dios. Él nos puede usar. Vemos que todos aquí están buscando paz, amor y esperanza. Nosotros, como iglesia, vamos a compartir la fuente de esas cosas. Cuando comenzamos a hablar de esto, ellos prestan atención”, concluyó.

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